La Sociedad Española de Salud y Medicina Integrativa (SESMI) recuerda que la microbiota puede impactar en la salud mental ya que conecta el intestino, las emociones y las respuestas comportamentales, en el conocido como eje microbiota – intestino – cerebro. Todo esto debería animar a los profesionales de la Medicina a reenfocar el diagnóstico y tratamiento de multitud de enfermedades y trastornos neurológicos, también desde la microbiota, con probióticos, prebióticos y psicobióticos” advierte la Dra. Mª Dolores de la Puerta Soler, especialista en salud intestinal y microbiota de la SESMI.

“según estos resultados, las interacciones sociales contribuyen a conformar la comunidad microbiana del intestino humano. Por el contrario, la ansiedad y el estrés están relacionados con una diversidad más reducida y una composición de microbiota alterada.”.