“Nada es más valioso que la risa.
Se requiere de fortaleza para reír y abandonarse a uno, para ser ligero.
Reírte con todas tus fuerzas te libera y dejarte llevar por la risa te hace sentir paz”.

Frida Kahlo

Vivimos tan apresurados, confusos, llenos de frustraciones, miedos y problemas que… “se nos ha olvidado sonreír”…

Una sonrisa natural es como una tarjeta de presentación, una invitación de bienvenida franca, una puerta abierta,
una acogida amable… Una sonrisa colorea los vacíos, pone luminosidad en la mirada y enciende el corazón.

A veces toca llorar y estar tristes, la vida es muy “anchilarga” y variada, no siempre llueve alegría, pero incluso, en esos momentos oscuros, también una sonrisa puede ser un faro de luz, una antorcha en la niebla, un bálsamo para el dolor y una brisa fresca para el alma…

“Sonreír es una actitud ante la vida, porque Sonreír también puede ser una Elección”.

En el fondo, casi Todo en la vida es una cuestión de elección, por eso mismo, una gran parte de la felicidad que sentimos depende de cómo elegimos mirar el mundo…
Ante cualquier cambio o circunstancia vital, podemos ver una posibilidad o un problema, un aprendizaje o un conflicto, una oportunidad o un atolladero…a menudo se trata del enfoque y de cómo elegimos reaccionar.
La realidad… ese concepto tan personal… según cómo se mire…

Por desgracia, no tenemos vacuna para el azar ni para los contratiempos y en numerosas ocasiones, la vida no es justa ni correcta ni buena, es más, puede ser muy dura… aunque es bonita igualmente.
Es maravilloso poder sentir gratitud cada día sólo por el hecho de estar vivos y tener la oportunidad de elegir qué hacemos con nuestra actitud… porque sonreír cuando todo va bien es muy fácil…

Podemos elegir salir del desván de la tristeza y entrar en la cocina de la alegría para hornear unas sonrisas que nos permitan hacer el camino más liviano.
Esa receta se prepara con amor, voluntad y emoción.
La fortaleza de seguir adelante nos la da la coherencia y si salpicamos todo ello con ilusión y esperanza, ya tenemos el cóctel perfecto para saborear cada momento de nuestra existencia.

Una de las grandes fuerzas del ser humano es la Emoción = Movimiento
(del latín Emotio, Emotionis, que se deriva del verbo Emovere…por tanto, una emoción es un impulso que saca a uno de su estado habitual).
Nos encontramos a veces tan enquistados o estancados, con patrones de conducta tan automatizados y repetitivos que nos vamos tropezando con nosotros mismos, por ello necesitamos algo que nos remueva por dentro y que nos impulse a vivir con mayor sentimiento.

Las emociones siempre se abren paso a la vida… como el agua, que invariablemente encuentra un resquicio por donde fluir…
Si tienes motivación suficiente, mueves tu mundo y encuentras salidas (aunque la solución no sea siempre como esperamos…)

¡¡ Qué bello es tener capacidad de sentir y emocionarnos !!

Aunque, personalmente, estoy convencida de que la mayor fuerza de todas reside en lo sutil y no del todo consciente, en esa energía invisible de la vida que mueve lo inimaginable si la sabes percibir y te dejas llevar por ella… porque te acoge, te activa, te acompasa… como cuando permites que alguien te guíe los pasos en un baile.
Para poder experimentar esa sensación sólo tienes que
“mirar con los ojos del alma…”

Mi deseo (y mi elección) es Vivir Siempre Sonriendo y con el Alma enamorada de la Vida.

TE PROPONGO UN RETO

¡¡¡ Prueba a Regalar tu Sonrisa durante el día completo de hoy a cualquier persona que se cruce contigo !!!
Cuesta muy poco y vale mucho.
Al final de la jornada verás que toda esa energía vuelve a ti multiplicada y acabas en la noche llen@ de buenas vibraciones y mucho más livian@.

Es más, procura reírte a menudo, tengas o no ganas, porque la risa es curativa.
Una vez leí que la risa nos conecta con el placer del universo…
Incluso, casi podríamos decir que reír es un acto alquímico, ya que produce reacciones en el organismo que mejoran toda nuestra bioquímica y fisiología, en especial la digestión.

Es decir, en el fondo reír promueve la salud porque optimiza el funcionamiento de nuestras defensas e incrementa nuestro índice de satisfacción vital (léase felicidad).

“A todo aquello que le pones Sonrisas y Amor se vuelve Magia”.

Dra. Pilar Morán